Gijón se convertirá los días 16 y 17 de noviembre en el punto de encuentro para las entidades, empresas y emprendedores que apuestan por la economía circular en el Principado gracias a circularweekend. Entre las entidades figura Humana que acude a este evento para aportar, compartir y aprender acerca de las posibilidades de este modelo económico, a cuya vanguardia se sitúa la gestión de textil usado. La participación de la Fundación se enmarca en el ciclo de actividades previsto con motivo de la Semana Europea de la Prevención de Residuos.
Desde la Fundación seguiremos el programa del evento, que cuenta con conferencias, ponencias, talleres y sesiones de asesoramiento acerca de los retos de la economía circular, entre otras actividades. Dedicará además un espacio para presentar nuevos proyectos. Todas las actividades se llevarán a cabo en el edificio Cristasa de Gijón Impulsa.
En la sesión del viernes 16 se hablará de cómo financiar proyectos, se harán propuestas para circularizar modelos de forma colaborativa y se expondrán casos reales. Ese mismo día por la tarde y el sábado se aplicará la metodología Ecocanvas: en grupos de trabajo, se desarrollarán las ideas presentadas por los asistentes con la ayuda de mentores y con varias charlas formativas. También está previsto un taller de modelos de negocio circulares, la presentación de proyectos y la votación de la mejor propuesta.
El evento circularweekend ya ha celebrado varias ediciones hasta la fecha: en dos ocasiones en Valladolid (en 2017 y este mismo año), y esta semana en Arteixo (A Coruña).
Humana y la economía circular
El año pasado, Humana organizó en Oviedo la jornada “Avanzando hacia la economía circular. La gestión sostenible de los residuos”, donde quedó de manifiesto que es insostenible seguir aplicando un modelo económico que agota los recursos naturales, de ahí la importancia de hacerlo por otro que contempla los residuos como recursos. Precisamente la gestión apropiada de los residuos, algo imprescindible para aplicar la economía circular, debe desempeñar un papel fundamental en el compromiso de administraciones y ciudadanía.
La preparación para la reutilización, el reciclado de fibras textiles y la valorización energética de la ropa que no es aprovechable son las principales características que hacen posible aplicar un modelo de economía circular a la gestión del textil usado. Y es que la prenda más sostenible es la ya fabricada.