El sábado seguimos con emoción la ceremonia de entrega de la XXX edición de los Premios Goya. Una emoción que se convirtió en alegría al ver como Natalia de Molina ganaba el Goya a la mejor actriz por su papel en Techo y Comida, de Juan Miguel del Castillo.
Se trata de una película que sentimos, en cierta medida, como nuestra, puesto que colaboramos con su producción cediendo parte del vestuario. De Molina interpreta a Rocío, una madre soltera y sin trabajo, que apenas tiene dinero para comer. Ante el miedo de perder la tutela de Adrián, intenta aparentar que ambos viven una vida normal. Sin embargo, su casero, también agobiado por las deudas, denuncia el impago del alquiler y Rocío se ve obligada a encontrar una solución.
Se trata del segundo Goya de Molina, puesto que en 2014 ganó el de Mejor Actriz Revelación por Vivir es fácil con los ojos cerrados , de David Trueba.
A través de nuestro Programa de Préstamos de Textil en el que participan productoras de cine, teatro y televisión, así como artistas, fotógrafos, músicos y creadores de diverso tipo la segunda vida de la ropa adquiere una nueva dimensión. Es la Cultura Reciclada.
Colaborar con este tipo de iniciativas tiene un triple valor para nosotros: en primer lugar, apoyando todo tipo de manifestaciones culturales; segundo, completando nuestra labor de sensibilización, puesto que estos proyectos ayudan a difundir la actividad de la organización; y, en tercer lugar, porque pone de relieve que con una gestión apropiada del textil usado, las posibilidades de reutilización son múltiples.