
De derecha a izquierda: Valentina Esteban, Concejal Delegada de Salud; Gonzalo Rodríguez, Alcalde de Punta Umbría; y María Palacios, de Humana.
El Ayuntamiento de Punta Umbría (Huelva) y Humana han firmado esta semana un convenio que rubrica la colaboración que la Fundación mantiene en el ámbito de la gestión del textil usado en el municipio. Al acto de la firma acudieron el alcalde, Gonzalo Rodríguez; la concejal delegada de Salud, Valentina Esteban, y Maria Palacios, representante de Humana.
La Fundación recogió 13.471 kg de textil usado en Punta Umbría en 2015, una cifra que representa un 3% de aumento respecto al año anterior. Humana tiene instalados en la localidad seis contenedores en los que la ciudadanía deposita la ropa, el calzado, los complementos y el textil de hogar que ya no utiliza para darles una segunda vida.
La recogida de textil es un servicio gratuito para el municipio y representa un ahorro importante en los gastos de recogida y eliminación de residuos urbanos. En la actualidad, la Fundación cuenta con más de 800 ayuntamientos y 500 empresas colaboradoras en España.
“Afortunadamente, cada vez hay más consciencia de los beneficios ambientales y sociales que representa la correcta gestión de residuos textiles. Estamos muy agradecidos a los vecinos y vecinas de Punta Umbría por sus donaciones y queremos que sepan que detrás de cada contenedor hay un trabajo intenso de preparación para la reutilización, con la finalidad de alargar la vida útil de las prendas y dar un fin social a la ropa usada”, afirma Andrés Lagares, responsable del área de Recogida de Humana en Andalucía.
Menos emisión de CO2
La reutilización y el reciclaje de textil contribuyen a la protección del medio ambiente, otorgando una segunda vida a una prenda que de otra manera iría a parar al vertedero: cada kilo de ropa que se reutiliza y no es incinerado evita la emisión de 3,169 kg de CO2, según datos de la Comisión Europea. Las 13,4 toneladas recogidas el año pasado en Punta Umbría representan un ahorro de 42,7 toneladas de CO2 a la atmósfera.
La jerarquía de gestión que establece la Ley 22/2011, de 28 de julio, prima la prevención de la generación de los residuos, impulsando en segunda instancia su preparación para la reutilización, en tercera instancia su reciclaje o aprovechamiento material, seguido de otros tipos de valorizaciones incluida la energética, y finalmente la disposición o eliminación segura, cuando el resto de opciones no ha sido posible. Esta jerarquía encaja en el Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos (PEMAR) 2016-2022 y en la Directiva Marco de Residuos (DMR) de la Unión Europea.
Todos los recursos generados con la actividad de recogida y valorización de la ropa en España se dedican al fin social de la organización. Gracias a ello, entre 2010 y 2014 se destinaron 9,3 millones de euros a proyectos de educación y agricultura en África, América Latina y Asia.